Foto: Heyder Manrique
El Palacio Municipal de Benito Juárez fue sede este domingo del Museo Viviente de la Impunidad, un performance diferente,en el que diversas colectivas feministas y simpatizantes alzaron la voz en contra de las injusticias que se viven en la ciudad.
Con un total de 30 estatuas humanas, como cada noveno día del mes, Cancún recordó a todas las personas que fueron víctimas de la manifestación del 9 de noviembre de 2020.
En dicha manifestación tan lamentable, elementos de Seguridad Pública repelieron a la ciudadanía con violencia, quienes solo expresaban su inconformidad y desprecio hacia los numerosos caso de feminicidios que ocurren en el municipio y el estado.
En el Museo, se interpretaron diversas situaciones de injusticia y violencia que se han cometido y continúan cometiéndose en Cancún.
Las y los participantes, recrearon tema como: la trata de personas, explotación sexual, falta de acceso a la educación, feminicidios, abuso de las autoridades, ecocidios, impunidad, falta de transparencia, amarillista en la prensa, la explotación infantil y la zozobra, entre muchas otras cosas que reflejan la descomposición social de uno de los polos turísticos más importante de México.
El movimiento, impulsado por el Comité de Víctimas del 9N , representa el primero en su tipo, y aunque se desconoce si llegaría a replicarse, ha sido un instrumento pacifico de expresión para hacer escuchar aquellas voces silenciosas que ya no pueden exigir justicia por si mismas.