Conoce el Museo Maya de Cancún

Se trata de la obra museística, ejecutado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia desde la construcción del Museo Nacional de Antropología (1964) y el Museo del Templo Mayor (1987). Resguarda una de las colecciones arqueológicas de la cultura maya más significativas del país, ya que no sólo incluyen las piezas más relevantes de Quintana Roo, sino una selección de piezas emblemáticas de los sitios de Palenque, Chichén Itzá y Comalcalco, entre otros sitios representados.

El edificio del museo, de diseño vanguardista y profundamente cuidadoso del entorno, fue diseñado por el arquitecto Alberto García Lascurain. Todos los núcleos componentes al conjunto manejan el mismo lenguaje arquitectónico. Se enfatiza en todo el complejo la imagen lineal con muros de celosía en concreto. Los espacios al aire libre permiten al visitante disfrutar del clima de la ciudad de Cancún, pero a pesar de contar con amplias superficies abiertas, conserva la sensación de resguardo con los pergolados en los andadores y demás circulaciones. El acceso al Museo está presidido por un conjunto escultórico del artista holandés Jan Hendrix, que representa el entorno selvático de la región sobre un espejo de agua. 

El espacio de exhibición se encuentra desplantado a ocho metros de altura e incluye tres volúmenes de pabellones de exhibición. Las salas de exhibición están confinadas dentro de los muros que definen también los andadores circundantes y cuentan con espacios recubiertos con vidrio de alta resistencia a los huracanes, que permiten una magnífica vista de la selva de San Miguelito y la laguna Nichupté. El acceso a los espacios museográficos se realiza a través de dos rampas, una helicoidal y otra recta, ubicadas en ambos extremos de las salas; también existen dos elevadores panorámicos. 

Los conjuntos más importantes están presididos por palacios con amplios espacios interiores y un vestíbulo con columnas que sostenían un techo plano, una innovación arquitectónica características de los edificios construidos entre los siglos XIII y XVI en la costa oriental de Quintana Roo. Estos edificios tenían funciones públicas, pues eran recintos abiertos, equipados con banquetas, dispuestos frente a un adoratorio, en el que se realizaban ceremonias y celebraciones en la que participaba la población.


El primer Museo Arqueológico de Cancún, ubicado originalmente en un área anexa al Centro de Convenciones de esa ciudad, fue inaugurado en 1982, con el objeto de difundir entre los visitantes locales, nacionales y extranjeros la cultura de los mayas prehispánicos asentados en el Norte del estado de Quintana Roo. En septiembre de 1988, el pequeño Museo suspendió sus actividades debido a los graves daños generados al edificio por el embate del huracán Gilberto, reabriendo sus puertas al público en el mes de julio de 1994. Los sucesivos huracanes que azotaron la costa quintanarroense dañaron nuevamente el edificio y el museo tuvo que cerrar definitivamente en 2004.


La primera sala del Museo está dedicada a la arqueología de Quintana Roo. Su recorrido cronológico inicia con los enterramientos más antiguos que se han hallado en cuevas sumergidas de la costa quintanarroense, pasando por la historia de los sitios monumentales del sur del Estado, hasta el auge de la región norte de la entidad o Costa Oriental previo al arribo de los conquistadores españoles. Las piezas reflejan el origen, desarrollo y estrategias de cambio de diversas ciudades; los ritos funerarios, elementos arquitectónicos, objetos rituales y domésticos que utilizaron los mayas de Quintana Roo a lo largo de dos mil años de historia. La sala cierra con un breve esbozo de la conquista, la época colonial y la Guerra de Castas que tuvo lugar durante el siglo XIX. 

La segunda sala abunda sobre aspectos generales de la civilización maya: su relación con el medio ambiente; el origen, desarrollo y ocaso de sus ciudades; sus actividades económicas, desde la agricultura hasta el comercio; las características de las élites gobernantes y las guerras entre ellos; sus más importantes expresiones culturales como la escritura y el calendario y algunos de sus ritos como el juego de pelota. Las piezas aquí exhibidas provienen tanto de excavaciones realizadas en Quintana Roo, así como en el resto de los estados mexicanos que abarca el área maya: Tabasco, Yucatán, Campeche y Chiapas. Una parte de estas obras han sido concedidas en préstamo por el Museo de sitio de Comalcalco, el Museo Regional de Yucatán “Palacio Cantón”, el Museo de sitio de Chichén Itzá, el Museo Regional de Chiapas y el Museo de sitio de Palenque “Alberto Ruz L’huillier”. 

La tercera y última sala está dedicada a la presentación de exposiciones temporales vinculadas a la temática y vocación del Museo.

-Con información del INAH